Hoy visitamos Sóller, «el valle de los naranjos», un pueblo encantador situado en el corazón de la Serra de Tramuntana y que cuenta con diferentes atractivos turísticos.
El principal es el tren que une Sóller con Palma: un pequeño tren de madera que atraviesa la Serra y los campos de naranjos y limoneros, que son los que dan nombre a esta zona.
Aquí podemos encontrar fantásticos ejemplos del Modernismo en Balears. En la calle Lluna, Ca’n Prunera, maravillosa casa señorial convertida hoy en museo de arte moderno.
La plaza, con la iglesia de San Bartolomé y su espectacular fachada invita a sentarse a tomar un café, aunque aquí lo que hay que probar es el zumo de naranja y si es en verano un refrescante helado. Sóller es famosa por los helados artesanales: de naranja, de almendra y, cómo no, de chocolate, harán las delicias de los más golosos.